Retales de una vida

28 noviembre 2008

-Creí que nunca más te iba a volver a ver… y créeme chaval, me alegro de haberme equivocado.
-Ya sabes eso que dicen: “mala hierba nunca muere”.
Bill ahogó una risa que se convirtió en una tos seca.
-Y de mala hierba tú sabes mucho.
Bruce no puedo evitar que una sonrisa asomara en su rostro, mientras ayudaba a Bill a sentarse en un viejo y polvoriento sillón.
-Estoy mayor- anunció Bill con un gesto serio.
-No, yo te veo bien.
-No mientas, sé que estoy mayor. Ya luché mis batallas, algunas las gané y otras las perdí… pero la edad es una batalla que todos, incluso tú, tenemos perdida de antemano; intentar luchar contra ella es estúpido.
Una luz tenue se colaba por las ventanas haciendo visible el considerable polvo suspendido en el aire.
-Pero una cosa es que esté mayor y otra que sea estúpido.
-Sé que no lo eres.
-Más te vale que pienses eso-Tras lo cual Bill soltó una sonora carcajada.- Bueno… ¿me vas a decir por qué has venido?
-No puede un hombre visitar a un viejo amigo.
-Viejo amigo sí, pero ya te he dicho que no soy estúpido, Bruce. Desapareces de un día para otro, ni te despides y no sabemos nada de ti en 2 años. Mira chaval, entiendo que te largaras, ya estabas harto de este mundo… pero ahora no me digas que has vuelto por nada.
-Quiero terminar lo que dejé, quiero terminar esta guerra.
-¿Y ser un héroe? Cuando uno es joven diferencia claramente a los héroes de los villanos, pero cuando uno llega a mi edad esa diferencia no está tan clara. Ahora dime Bruce, ¿eres un héroe o un villano?
En ese momento Bruce supo que cualquier respuesta que diera sería mentira. Sus manos estaban manchadas de sangre y muy posiblemente se mancharían aún más, y todo por un fin del que él mismo había llegado a dudar. Ahora mismo solo se consideraría un héroe si Maquiavelo tenía razón y lo importante era el fin sin contar los medios.
-¿En qué piensas?- Interrumpió Bill, rompiendo el silencio.
-En si alguna vez he estado en el bando correcto.

Corto y cambio,
PD. Informo que éste es un relato original de ficción, todo parecido con la realidad es casual.